jueves, 14 de enero de 2010

Da mas y recibirás mas, el arte del desempeño.



Da mas y recibirás mas, el arte del desempeño

La cultura del trabajo se rige por las normas y reglamentos en las empresas e instituciones, pero estas se ven trastocadas cuando hay una corriente superior dictada por las políticas y leyes de los gobiernos que pretenden lograr quedar bien con determinado grupo social por encima del equilibrio entre trabajadores y empleadores. Independiente de los logros sociales que se han alcanzado en los últimos tiempos en materia de los derechos laborales, hay algunos partidos políticos que pretenden ganar mas adeptos coreando consignas y exacerbando los ánimos en contra de un grupo contra otros de los trabajadores en contra de los empleadores, con el eufismo de que los unos son explotados por los otros como si fuera una condición perse’. Este ambiente va en detrimento de la eficiencia y rentabilidad de las empresas por las actitudes y comportamientos tomados como respuesta a la psicología humana de que soy explotado y por tanto no debo de rendir lo suficiente para no hacerles la bolsa a los ricos y capitalistas.

Como es sabido no solo entre los economistas de que la riqueza de las naciones es la sumatoria de las riquezas de los individuos y por lo tanto que esto se logra con el aporte de cada quien que contribuye al desarrollo de un país. Si me dejo llevar por esa actitud displicente al trabajo motivada por una corriente política de valores opuestos a la productividad y el desempeño estaré atentando contra mi empresa y contra mí mismo, porque va en contra de toda lógica y es una actitud antinatural. La naturaleza siempre nos da más de lo que esperamos, cuando sembramos, la naturaleza nos regresa la cosecha con mas granos multiplicados que los que sembramos, los arboles nos dan sus frutos multiplicados y no en proporción a la singularidad del árbol sino multiplicados siempre. De esa forma para bienestar del ser humano y de la sociedad en general nuestra actitud debe de ser siempre dar mas de los que se nos pide, creando un ambiente de prosperidad y atrayendo buenos propósitos para nuestro trabajo.

Una persona que da mas en su trabajo, es una persona que siempre será bien vista, sobresaldrá por encima de la mayoría, se destacara en su desempeño y siempre será tomado en cuenta porque su trabajo será apreciado por sus superiores. Sera una persona que le lloverá la abundancia y será bendecido por la prosperidad. Esto mismo se cumple para las empresas, que deben de dar mas, recorrer una milla mas como dicen en la literatura empresarial, eso significa dar mas de lo que espera el cliente y este se sentirá satisfecho, se sentirá agradecido por un servicio que no esperaba y sobrepasa las expectativas normales, esto crea clientes satisfechos que luego se convierten en clientes leales, que siempre se decidirán por ti a la hora de escoger entre varias opciones.

La mediocridad se esta apoderando de nuestra actitud y es un mal endémico que está creciendo cada día mas, es como un cáncer que esta carcomiendo los cimientos de un pueblo trabajador. Lo vemos todos los días en los trabajos, tratando de no hacer lo que nos corresponde, dejando para después las responsabilidades del día, preferimos las tertulias a la hora de la oficina, nos escapamos del puesto de trabajo cada vez que podemos, nos dedicamos a jugar en la computadora, hacemos cualquier cosa con tal de perder el tiempo y por ende no contribuimos a la rentabilidad de la empresa, del centro que nos da de trabajar, que la empresa se debe a sus ganancias que si no gana se desmorona y se ve obligada a cerrar dejando en el desempleo a muchas personas. Entonces si sabemos que nuestra actitud hacia el trabajo le hace daño a la empresa y por ende nosotros mismos somos los perjudicados, porque actuamos así. Y eso se debe a la falta de una moral y de una autoestima lo suficientemente fuerte que me diga que mi trabajo vale, que soy útil a la empresa y la sociedad y que debo de procurarme el alimento con el sudor de mi frente, no esperando de que me regalen las cosas.

Recuerdo cuando mi padre siempre me decía que diera lo mas que pudiera en cualquier trabajo que estuviera desempeñando, si me tocaba ser barrendero, pues debía ser el mejor barrendero, si era lustrador de calzado, pues debería ser el mejor lustrador, si estaba de mecánico pues debería de reparar los vehículos de tal forma no prestando atención a la falla por la cual entro, sino prestar atención a todos los posibles defectos que puede presentar el vehículo e informarle al cliente de los otros problemas que pueden ocasionarle inconvenientes en el futuro para ver si se decide a repararlos de una sola vez o no. Pero eso no sucede, nos movemos como energúmenos en nuestros puestos de trabajo, conspirando contra nuestros jefes y tratando de boicotear el trabajo de los demás. Porque somos asi?, que nos impide en ser los mejores, en dar lo mejor cada día y crecer como persona a diario.
El reverendo Joel Osteen lo decía en uno de sus discursos sobre ser excelentes en nuestro puesto de trabajo, que hay que dar lo mejor de nosotros mismos porque de esa forma honramos a Dios y este nos bendecirá, también de esa forma ayudamos a preservar las fuentes de trabajo ahora que estamos viviendo tiempos de crisis y que las empresas están cerrando. Ser malos trabajadores es atentar contra nosotros mismos, por lo tanto nos privamos de la bendición de Dios.

Dar más y obtenga más se cumple en todos los sentidos de la palabra, y ese es el habito correcto que hay que desarrollar, no importa el lugar donde nos encontremos, nunca pensemos que nos están matando con el salario que tenemos porque ese fue el acordado con nuestro empleador, si considero que me merezco algo mas pues debo hacérselo saber y también haber demostrado porque valgo mas, pero con una actitud displicente, negativa, más bien lleno mi espíritu de negatividad que se traduce en actitudes de indiferencia y mediocridad, haciendo de esto un comportamiento y una actitud que a final de cuentas termina ahogándonos hasta en nuestro hogar. Porque los pensamientos se reproducen en nuestra actitud, y nuestra actitud crea hábitos que son los que determinan las circunstancias. Si queremos rodearnos de prosperidad y progreso siempre tengamos presente dar una milla mas, dar una paso mas adelante, dar mas de lo que nos piden, hacer mas, que entre mas hagamos seremos recompensados y con creces.

“La civilización no dura porque a los hombres sólo les interesan los resultados de la misma: los anestésicos, los automóviles, la radio. Pero nada de lo que da la civilización es el fruto natural de un árbol endémico. Todo es resultado de un esfuerzo. Sólo se aguanta una civilización si muchos aportan su colaboración al esfuerzo. Si todos prefieren gozar el fruto, la civilización se hunde.”
José Ortega y Gasset (1883-1955) Filósofo y ensayista español.


“Nuestra recompensa se encuentra en el esfuerzo y no en el resultado. Un esfuerzo total es una victoria completa.”
Mahatma Gandhi (1869-1948) Político y pensador indio.



William Pavon
Ocotal 13 de Enero del 2010
Nicaragua

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