La actuación de las personas es como la actuación de los gobiernos, todos dirán que el gobierno es una expresión del desarrollo socio político y económico de una sociedad, pues esta bien, pero también esa característica de incertidumbre, de andar errático que es propio de los seres humanos cuando estamos creciendo y pasando por diferentes etapas de nuestro desarrollo, en los gobiernos se refleja de una manera mas dramática.
De acuerdo a la definición de Wikipedia de que cosa es una dictadura la define de la siguiente forma:
La dictadura (del latín dictatūra) es una forma de gobierno en la cual el poder se concentra en torno a la figura de un solo individuo (dictador) o élite, generalmente a través de la consolidación de un gobierno de facto, que se caracteriza por una ausencia de división de poderes, una propensión a ejercitar arbitrariamente el mando en beneficio de la minoría que la apoya, la independencia del gobierno respecto a la presencia o no de consentimiento por parte de cualquiera de los gobernados, y la imposibilidad de que a través de un procedimiento institucionalizado la oposición llegue al poder.
A traves de la historia de la humanidad hemos visto diferentes formas de gobierno, diferentes modelos socio-económicos y políticos, y también dictaduras como un tipo de modelo especifico que en la mayoría de los casos han ocasionado atrasos, miseria y pobreza, sufrimiento y dolor a sus pueblos. Así de igual forma nosotros los seres humanos abrigamos estilos y pensamientos que rigen nuestra vida unas veces muy inteligentes y progresistas y otros muy nocivos. Al que me quiero referir es a esos pensamientos que dominan nuestra mente y nuestro corazón convirtiéndonos en esclavos sumisos y nos inducen a ser victimas de las drogas, el alcohol, la corrupción, los vicios, la delincuencia y así sucesivamente todos los males que podamos imaginar. Es por eso que comparamos ese proceder a una dictadura pero del corazón y la conciencia, en este caso es la dictadura de la ignorancia, de la ambición, de los vicios sobre nuestra alma, haciendo que vivamos como borregos y nos movamos en la dirección que nos lleva la corriente, no somos capaces de formar un criterio, de germinar una idea o encubar un proyecto digno, sino solo de maldad o conformismo con la triste realidad que vivimos. No somos capaces de ser agentes de cambio porque desde ya estamos derrotados por nuestra ineptitud e ignorancia que nos dice que tu no eres capaz de pensar nada bueno.
Esa dictadura individual que llevamos dentro, que nos oprime, se puede derrotar a través de la cultura y la educación, a través de la fuerza de voluntad de aceptar que somos débiles pero podemos cambiar, de comprometernos con el cambio para una vida mejor. Y en la medida que cambiemos y nos eduquemos, vamos a ser ciudadanos mejores que tambien vamos a promover un cambio en la sociedad, transformando los vicios de los gobiernos al inculcarle nuevos valores. Nada esta perdido y nunca es tarde para comenzar a cambiar, a escoger el camino de la felicidad.
William P